Qué ver en Howth: Un lugar tranquilo para disfrutar del mar irlandés y las delicias de su puerto
Fotos: Danny Gebran
A tan solo media hora del bullicioso corazón de Dublín, se esconde uno de los rincones más encantadores de la costa este de Irlanda: Howth, un pequeño pueblo pesquero que parece detenido en el tiempo, con una encantadora marina, barcos de colores, mercados con aroma a mar y una comunidad que vive al ritmo de las olas.
Llegar a Howth es sorprendentemente sencillo. Desde Dublín Pearse Station, los trenes operados por Iarnród Éireann (Irish Rail) parten con frecuencia hacia este idílico puerto. El trayecto dura apenas 31 minutos, con un coste entre 3 € y 6 €, lo que lo convierte en una escapada perfecta de un día desde Dublín. También es posible optar por el autobús, con un tiempo de viaje de 41 minutos, aunque el encanto del tren costeando el mar es difícil de superar.
Su historia
Howth ha sido un puerto clave desde tiempos medievales. Sus raíces se hunden en leyendas vikingas, historias de invasiones y el constante ir y venir de barcos pesqueros.
En la Edad Media, fue un punto estratégico de comercio y defensa, y aún hoy conserva vestigios de su historia, como el castillo de Howth, residencia de la misma familia desde el siglo XII.
Fotos: Danny Gebran
La joya del pueblo: su puerto y la marina
El verdadero corazón de Howth es su puerto, un lugar donde el presente y el pasado se entrelazan entre redes de pesca, embarcaciones modernas y barcos tradicionales. La marina de Howth no solo es una de las más importantes de Irlanda en términos de actividad náutica, sino también un punto neurálgico para los amantes del mar.
Fotos: Danny Gebran
Aquí, la pesca no es solo una actividad económica: es un modo de vida. Los pescadores locales, muchos de ellos de familias que llevan generaciones lanzando redes al Atlántico, atracan sus barcos al amanecer cargados de langostas, cangrejos, caballa y bacalao. No es raro ver cómo descargan su pesca fresca mientras las gaviotas sobrevuelan el muelle.
Además de la pesca tradicional, el puerto acoge diversas actividades recreativas. Escuelas de vela, excursiones en barco, observación de focas y paseos al faro de Howth son algunas de las experiencias que permiten a los visitantes vivir el mar desde dentro.
Gastronomía marina y ambiente local
La pesca del día encuentra su destino en los muchos restaurantes y puestos de mariscos que bordean el puerto. Desde fish and chips crujientes servidos en cucuruchos de papel hasta elegantes platos de ostras frescas y mejillones al vino blanco, la gastronomía de Howth es un tributo al mar. Entre los lugares más recomendados están Aqua Restaurant, con vistas al puerto, y Beshoffs Bros, un clásico local.
El mercado de Howth, abierto los fines de semana, también ofrece delicias locales, artesanía y productos frescos. Es el lugar ideal para empaparse del ambiente relajado y auténtico del pueblo.
Fotos: Danny Gebran
Datos curiosos y razones para volver
En Howth viven poco más de 8.000 personas, lo que lo convierte en un lugar tranquilo y acogedor, ideal para quienes huyen del ritmo frenético de las grandes ciudades.
Desde su puerto parten rutas para observar aves marinas y focas que se acercan curiosas a los barcos.
El faro de Howth fue construido en 1817, y todavía guía a los marineros que regresan del mar.
Las vistas desde el Howth Cliff Walk son espectaculares, especialmente al atardecer, cuando el mar parece fundirse con el cielo.
Fotos: Danny Gebran
Un rincón que enamora
Howth no es solo un destino turístico: es una experiencia sensorial. Su brisa marina, el sonido de las velas golpeando los mástiles, el sabor de los mariscos frescos y la calidez de su gente hacen que este pequeño pueblo costero sea una joya irlandesa por descubrir.
Fotos: Danny Gebran
Para los amantes del mar, la pesca, la gastronomía y la tranquilidad, Howth es simplemente irresistible. Ya sea por unas horas o unos días, este refugio de redes y faros dejará una huella salada y feliz en cualquier viajero.
Fotos: Danny Gebran