Cómo cuidar tu piel según el destino: consejos esenciales para viajeros

Viajar es una experiencia inolvidable, pero cuidar la piel durante el trayecto es crucial para evitar daños a largo plazo.

La piel, el órgano más extenso del cuerpo humano, es nuestra primera barrera de protección frente al entorno. Durante un viaje, la exposición a diferentes climas y condiciones ambientales, como el sol abrasador de una playa tropical o el frío seco de una montaña nevada, puede afectar su salud. Por eso, adoptar una rutina de cuidado específica según el destino es fundamental para mantenerla protegida e hidratada.

Cuidado de la piel en climas cálidos y soleados

En destinos de clima cálido, la exposición solar intensa y el sudor son los principales factores que pueden dañar la piel. Las recomendaciones clave incluyen:

  1. Hidratación constante:
    El calor y la exposición prolongada al sol pueden deshidratar la piel rápidamente. Es fundamental aplicar cremas hidratantes ligeras con ingredientes humectantes como ácido hialurónico y glicerina, además de beber agua con regularidad para mantener el equilibrio hídrico interno.

  2. Protección solar rigurosa:
    Aplica un protector solar de amplio espectro con un FPS de al menos 50, que proteja contra los rayos UVA, UVB y la luz visible. Reaplícalo cada dos horas, especialmente después de nadar o sudar.

    • Dato importante: Incluso en días nublados, hasta el 80 % de los rayos UV atraviesan las nubes, por lo que el uso de protector solar sigue siendo imprescindible.

  3. Accesorios de protección:
    Complementa el cuidado de la piel con el uso de gafas de sol con filtro UV certificado, sombreros de ala ancha y ropa con protección solar integrada (UPF).

  4. Evita las horas de mayor radiación:
    Limita la exposición directa al sol entre las 10:00 y las 16:00, cuando la radiación solar es más intensa.

Cuidado de la piel en climas fríos y secos

Los destinos de clima frío y seco, como montañas o regiones polares, pueden provocar sequedad extrema y agrietamiento de la piel. Aquí, la hidratación y la protección frente al frío son primordiales:

  1. Hidratación intensiva:
    Opta por cremas hidratantes más densas y nutritivas, ricas en lípidos y ceramidas, que refuercen la barrera cutánea y eviten la pérdida de agua.

  2. Protección contra el frío:
    El viento frío puede causar irritación y enrojecimiento. Usa bálsamos labiales y cremas específicas para zonas expuestas, como las manos y el rostro.

  3. Protección solar en la nieve:
    La nieve refleja hasta el 80 % de los rayos UV, aumentando el riesgo de quemaduras solares. Asegúrate de aplicar protector solar, especialmente en el rostro, y utiliza gafas con filtro UV para proteger tus ojos.

Cuidados durante el viaje en avión

Los viajes aéreos suponen un reto adicional para la piel debido al aire presurizado y seco de la cabina, lo que provoca deshidratación y tirantez:

  1. Hidratación antes, durante y después del vuelo:
    Aplica una crema hidratante ligera antes de abordar y lleva contigo un spray de agua termal para refrescar tu piel durante el vuelo. No olvides beber suficiente agua para contrarrestar la deshidratación.

  2. Protección contra radiación UV:
    Aunque parezca innecesario, es recomendable aplicar protector solar durante el vuelo, especialmente si viajas cerca de la ventana, ya que la radiación UV atraviesa los cristales de la aeronave.

  3. Relajación para evitar el estrés cutáneo:
    El estrés del viaje puede afectar la piel, aumentando la producción de cortisol, lo que puede desencadenar brotes de acné o irritaciones. Practica ejercicios de respiración o escucha música relajante para mantener la calma durante el trayecto.

Rutina de limpieza básica según el destino

Una correcta limpieza de la piel es esencial para evitar problemas cutáneos como acné o puntos negros:

  1. En climas cálidos:
    Usa un limpiador suave que elimine el sudor y la grasa sin resecar la piel. Evita productos agresivos que puedan causar irritación.

  2. En climas fríos:
    Prefiere limpiadores cremosos o a base de aceite, que limpien sin eliminar los aceites naturales de la piel.

Productos esenciales que no pueden faltar en tu equipaje

  • Protector solar de amplio espectro (FPS 50 o superior).

  • Crema hidratante ligera para climas cálidos y densa para climas fríos.

  • Bálsamo labial con protección UV.

  • Spray de agua termal o bruma facial.

  • Gafas de sol con filtro UV y ropa con protección solar integrada (UPF).

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