Ámsterdam intensifica medidas contra el turismo masivo: ¡Prohibirá los Cruceros para 2035!

A casi un año de haber prohibido el atraque de grandes cruceros en su centro, Ámsterdam ha decidido imponer nuevas y estrictas limitaciones a las visitas de estos gigantes marítimos.

A partir de 2026, solo se permitirá el arribo de 100 cruceros al año, en comparación con los 190 programados para 2024, y para 2035, la capital holandesa no permitirá la visita de ningún crucero.

La medida forma parte de un esfuerzo más amplio para combatir la contaminación y la aglomeración turística. "Los cruceros transatlánticos son contaminantes y causan aglomeraciones y emisiones en la ciudad", declaró el municipio en su reciente anuncio.

Además de reducir el número de cruceros, Ámsterdam está implementando requisitos más estrictos para reducir las emisiones de los barcos. A partir de 2027, todos los cruceros deberán utilizar energía eléctrica en tierra, una medida destinada a minimizar las emisiones de gases de efecto invernadero y mejorar la calidad del aire en la ciudad.

Estas decisiones, aunque necesarias para la protección del medio ambiente, tendrán un impacto económico significativo. El municipio estima que la pérdida de ingresos debido a la reducción del turismo podría oscilar entre 46 y 103 millones de euros, según un informe de Bloomberg.

Para mitigar parte de este impacto, la Autoridad Portuaria de Ámsterdam está planeando reubicar la terminal de pasajeros a Coenhaven, una localidad situada a unos 20 minutos de la ciudad, para el año 2035. "En colaboración con el Ministerio de Infraestructura y Gestión del Agua, la Autoridad Portuaria y la Provincia de Holanda Septentrional, se está investigando si es financieramente y legalmente posible trasladar la PTA a Coenhaven", explicó el municipio. La decisión final se tomará en consulta con las autoridades pertinentes.

Si bien el anuncio reciente no aborda específicamente los cruceros fluviales, en abril, las autoridades indicaron que también planean reducir a la mitad el número de estos cruceros, de aproximadamente 2,300 a 1,150 anuales.

Estas acciones subrayan el compromiso de Ámsterdam con la sostenibilidad y la gestión responsable del turismo, priorizando la calidad de vida de sus residentes y la preservación del medio ambiente por encima de los ingresos económicos inmediatos. Los próximos años serán críticos para observar cómo estas medidas afectan la dinámica turística y económica de la ciudad.

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