Hoteles del Caribe refuerzan medidas de seguridad tras el paso del huracán Beryl
Con la llegada del huracán Beryl, ahora una tormenta de Categoría 2, los países del Caribe han intensificado sus preparativos y respuestas para minimizar el impacto de este fenómeno natural.
Las compañías hoteleras en la región, conscientes de los riesgos asociados a estos eventos, han implementado rigurosos protocolos para garantizar la seguridad de huéspedes y empleados.
La preparación ante la temporada de huracanes, que oficialmente se extiende del 1 de junio al 30 de noviembre, comienza mucho antes de la llegada de las tormentas. Los hoteles realizan evaluaciones exhaustivas de riesgo para identificar vulnerabilidades y adquirir equipos de emergencia, como generadores de energía y suministros médicos básicos. Desarrollar planes de evacuación claros y aumentar las reservas de alimentos y agua son medidas esenciales.
La comunicación efectiva es vital durante estos eventos. Los establecimientos informan a sus huéspedes sobre los protocolos de seguridad, las políticas de cancelación y las opciones de seguro disponibles. Revisar y asegurar coberturas adecuadas en las pólizas de seguros es crucial para protegerse contra daños a la propiedad y la interrupción del negocio.
Respuesta al Huracán Beryl
A medida que el huracán Beryl se adentra en el Golfo de México, varias partes del Caribe se están recuperando. Las Islas Caimán evitaron un impacto directo, con la tormenta pasando a unas 50 millas al sur de Grand Cayman Island. Aunque se registraron cortes de energía, no hubo daños graves reportados.
Nicola Madden-Greig, presidenta de la Asociación de Hoteles y Turismo del Caribe (CHTA), elogió la respuesta de los resorts jamaicanos. "Jamaica evitó lo peor del huracán y hemos vuelto a las operaciones comerciales normales", afirmó, destacando que no hubo huéspedes heridos y que la mayoría de los hoteles salieron ilesos.
Esfuerzos de Recuperación
Sandals Resorts International informó que sus propiedades en Jamaica, Barbados, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía y Granada están operativas, aunque algunas en Jamaica funcionan con generadores de respaldo. Los daños se limitaron principalmente a la vegetación y mobiliario exterior.
La Fundación Sandals ha establecido una iniciativa de “Ayuda en Desastres” para apoyar los esfuerzos de emergencia en el Caribe, asegurando que el 100% de las donaciones se destinen directamente a la respuesta ante desastres. Sandals agradeció a sus empleados por su dedicación y a los huéspedes y socios por su comprensión y colaboración.
Tras cada temporada, las evaluaciones y mejoras continuas en los protocolos de seguridad son esenciales. La gestión del riesgo de desastres es un proceso en constante evolución, y las lecciones aprendidas de cada evento son fundamentales para fortalecer la resiliencia y la preparación futura.
A medida que el Caribe se enfrenta a la temporada de huracanes, las compañías hoteleras demuestran una vez más su compromiso con la seguridad y el bienestar de todos, adaptándose y respondiendo de manera efectiva a los desafíos que presentan estos fenómenos naturales.